Artículo de opinión
Por Carlos Alberto Bozo
Observando las noticias recientemente, me pongo a pensar hacia dónde nos lleva este proceso de cambio, pero ¿a qué me refiero?:
Si analizamos la situación de nuestro país, deberíamos empezar por lo acontecido en las diferentes prefecturas que fueron ganadas mediante voto por quienes denominamos opositores, que a la fecha ya solo queda 1.
Luego, no solo con eso, veamos qué viene aconteciendo con nuestros empresarios privados ó inversionistas extranjeros y la visión mundial de que en nuestro país no es confiable ni la inversión, ni el trabajo.
En lo que va del presente año hago una recapitulación de eventos tales como:
En Sucre, la nacionalización de Fancesa, por deudas al Estado y enriquecimiento ilícito.
Por Carlos Alberto Bozo
Observando las noticias recientemente, me pongo a pensar hacia dónde nos lleva este proceso de cambio, pero ¿a qué me refiero?:
Si analizamos la situación de nuestro país, deberíamos empezar por lo acontecido en las diferentes prefecturas que fueron ganadas mediante voto por quienes denominamos opositores, que a la fecha ya solo queda 1.
Luego, no solo con eso, veamos qué viene aconteciendo con nuestros empresarios privados ó inversionistas extranjeros y la visión mundial de que en nuestro país no es confiable ni la inversión, ni el trabajo.
En lo que va del presente año hago una recapitulación de eventos tales como:
En Sucre, la nacionalización de Fancesa, por deudas al Estado y enriquecimiento ilícito.
En Cochabamba, la nacionalización de la Electrificadora de los inversionistas españoles.
Luego los problemas en centros mineros como los de Colquiri, Kantumarca, enfrentándonos entre hermanos.
Aerosur, que a la fecha, según declaraciones del ministro de Obras Públicas, tiene una deuda que, hasta la fecha, suman un total de 450 millones de bolivianos al Estado y 50 millones a terceros, sumando un total de 500 millones de bolivianos. Sobre éste punto un analista en Red Uno (Canal 11), decía que ésta deuda podía haberse evitado sí el Estado hubiera puesto un alto a tiempo, cosa que podía hacer, y que por más soluciones que ofrezca el nuevo inversionista, más trabas pondrían la ATT y nuestro gobierno.
No contento con esto, está nuestra producción textil, como el caso de Ametex que por más ayuda que solicitó al gobierno, y en busca de mercado, terminó nacionalizada por deudas al Estado y enriquecimiento ilícito.
Sin ir lejos, los representantes sindicales de los trabajadores textiles tratan de salvar a dos empresas más, una textilera e Hilbo, y ésta última lleva bastante tiempo tratando de salir a flote. Pero su representante perdía esperanzas porque dentro unos días también se declararía en quiebra y sería nacionalizada.
Luego los problemas en centros mineros como los de Colquiri, Kantumarca, enfrentándonos entre hermanos.
Aerosur, que a la fecha, según declaraciones del ministro de Obras Públicas, tiene una deuda que, hasta la fecha, suman un total de 450 millones de bolivianos al Estado y 50 millones a terceros, sumando un total de 500 millones de bolivianos. Sobre éste punto un analista en Red Uno (Canal 11), decía que ésta deuda podía haberse evitado sí el Estado hubiera puesto un alto a tiempo, cosa que podía hacer, y que por más soluciones que ofrezca el nuevo inversionista, más trabas pondrían la ATT y nuestro gobierno.
No contento con esto, está nuestra producción textil, como el caso de Ametex que por más ayuda que solicitó al gobierno, y en busca de mercado, terminó nacionalizada por deudas al Estado y enriquecimiento ilícito.
Sin ir lejos, los representantes sindicales de los trabajadores textiles tratan de salvar a dos empresas más, una textilera e Hilbo, y ésta última lleva bastante tiempo tratando de salir a flote. Pero su representante perdía esperanzas porque dentro unos días también se declararía en quiebra y sería nacionalizada.
Después de analizar a grosso modo estos eventos, vuelve a surgir la interrogante de ¿hacia dónde nos lleva este proceso de cambio?
A mi parecer es una senda oculta, bajo el término de proceso de cambio en Democracia directo al Socialismo, tal como las ideologías que abrazan nuestros gobernantes.
Hoy en día pedimos libertad de expresión y Democracia pero ¿Son ésas las palabras que caracterizan a un gobierno, electo con un arrollador 64% de votos, que ostenta las siglas MAS (Movimiento Al Socialismo)?
A mi parecer es una senda oculta, bajo el término de proceso de cambio en Democracia directo al Socialismo, tal como las ideologías que abrazan nuestros gobernantes.
Hoy en día pedimos libertad de expresión y Democracia pero ¿Son ésas las palabras que caracterizan a un gobierno, electo con un arrollador 64% de votos, que ostenta las siglas MAS (Movimiento Al Socialismo)?